desde que le dio el infarto a mi padre en navidad se tomó en serio lo de cuidarse: dejó de fumar, cuidó la alimentación, empezó a hacer algo de ejercicio andando.... y cada vez andaba más. hasta tal punto que desde que se fue a la playa el pasado 15 de julio, se le vantaba temprano y se iba a la montaña que hay por ahí (la sierra de hirta) a hacer no se cuántos kilómetros... ¡¡solo!! (vale que ni mi hermano ni yo estamos allí y mi madre no está para darse esas caminatas, pero eso no es excusa para irse solo). pues bien, el viernes pasado se fue a una de estas y volvió más tarde de lo habitual y muy cansado. al poco empezó a sentir los síntomas otra vez, llamaron a la ambulancia y se lo llevaron al hospital de vinaroz. allí el médico le echó una buena bronca por irse solo y meterse esas palizas de andar que ni un deportista porque, lo más probable, es que esta vez le haya dado el infarto por un sobreesfuerzo. afortunadamente ha sido leve y no ha causado daños nuevos: hoy ya le han dado el alta. sólo espero que, a partir de ahora, se tome las cosas con más tranquilidad y deje de darnos estos sustos...
4 comentarios:
Si es que tan malo es quedarse corto como pasarse. Aysh! Gracias a dios no ha sido más que otro susto. Esperemos que aprenda ahora a controlarse un poco más en su control ;)
Cuanto mayores nos hacemos, más nos parecemos a los niñós ;)
Por cierto, si vives cerca de Vinaroz no estamos muy lejos...
ummo, vivo en Granada pero ellos están de vacaciones en Peñíscola, por eso lo llevaron a Vinaroz ;)
¡Ahhhhhhhhhh...! ;)
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